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La Confederación Nacional de Mujeres Campesinas Indígenas Originarias de Bolivia «Bartolina Sisa», recuerda el 24 de junio, como un hito en la vida revolucionaria de Bolivia, fecha en la que mineros de Siglo XX, Catavi y Llallagua fueron masacrados durante el gobierno pro imperialista de Rene Barrientos Ortuño, un hecho registrado en la historia como la Masacre de San Juan.
Al respecto, Segundina Flores, Ejecutiva Nacional de esta organización, indicó que: “el 24 de junio, además de San Juan, la noche más fría del año, recordamos la masacre a nuestros hermanos mineros, que fueron asesinados, por estar en contra de un gobierno imperialista tan solo por planificar un Ampliado, como nosotros realizamos, por eso debemos de recordar esta fecha importante para reflexionar y recordar la época de la dictadura donde no podíamos ni reunirnos, porque las fuerzas armadas asesinaban sin piedad, ahora estamos volviendo a esa época donde nos reprimen con el fusil, eso debemos de reflexionar”, comentó.
La historia nos recuerda que paralelamente a los acontecimientos de la Guerrilla de Ñancahuazú. liderada por Ernesto «Che» Guevara, en las minas volvía a vivirse un clima de agitación, los sindicatos demandaban la reposición de sus salarios, libertad para sus dirigentes apresados y confinados, además de fijar una posición en torno a la guerrilla y su probable apoyo masivo. El 24 de junio de 1967, durante la noche, mientras los obreros y sus familias celebraban San Juan, tropas del Ejército atacaron el campamento. Los militares lograron reducir al movimiento obrero, se perpetró una masacre que dejó decenas de muertos y heridos. Además, se procedió a la detención de los delegados al ampliado y varios dirigentes. Barrientos justificó la masacre señalando que los mineros no se habían reunido a discutir problemas sociales, sino para dar su apoyo a la guerrilla del “Che”.