• Quiero rendir un reconocimiento a un pueblo sabio, a ese pueblo que ha decidido hace décadas, gobernar su futuro, decir que esta tierra le pertenece, que no van a renunciar nunca, que democráticamente quiere decidir el futuro.

• Este país es de cada una de las bolivianas y tienen todo el derecho de pelear y ganar, un futuro que empieza para Bolivia, menos de 20 años cuando hay un cambio histórico, cuando Bolivia pasa de ser un país olvidado en el abandono con la gran mayoría de sus ciudadanos sin ser reconocidos y empieza a ser un país que cuenta con su gente a construir su futuro, un futuro que en pocas décadas ha cambiado la historia de Bolivia.

• Los jóvenes saben por sus padres como era la Bolivia de hace 30 años el desprecio, la marginación, la pobreza absoluta, la miseria del olvido, los privilegios las limitaciones. La fuerza de la democracia que se expresó año y medio diciendo un mensaje al mundo muy importante. ¡hoy seguramente no lo valoramos todo! Pero los que estábamos en Madrid sufriendo cuando se produjo el golpe de estado, la salida de un presidente y la entrada de una presidenta, muertos, riesgo de intervención militar, vivimos con angustia. Porque confiábamos deseábamos, habíamos apostado que en Latinoamérica no volviera los golpes institucionales sin consolidar la democracia y hubo unas semanas que se adueñó la incertidumbre que los mensajes, muchos de ellos intencionados querían crear una historia falsa, distinta y diferente a lo que de verdad se había vivido. Debemos recordar ese tiempo y especialmente poner en valor como la sociedad boliviana pacíficamente en las urnas democráticamente e inapelablemente con un voto contundente mayoritario dijeron: ¡No queremos volver al pasado! Queremos futuro, justicia social, libertad, convivencia, soberanía, poder civil, año y medio después con el presidente Luis Arce tenemos una Bolivia estable.